La sombra personal se desarrolla en todos desde la infancia. Abarca pensamientos y sentimientos, conductas que poseemos y que no aceptamos por ser incompatibles con las normas sociales y el “deber ser” de la personalidad ideal impuesta. Desterramos cualidades que no se adecuan a nuestra imagen ideal, de esta manera el ego y la sombra se van edificando simultáneamente.
Nuestra educación, a través de los padres, maestros, familiares, religiosos, etc. contribuyen a la formación de la sombra al decir que está permitido y que no lo está. Tendemos a pensar que todo en la sombra es negativo, y esto es una mentira, pues en ella también residen talentos y aptitudes que permanecen ocultos. La sombra permanece conectada con las profundidades del alma en su estado más puro, es amoral.
La sombra sólo es peligrosa cuando no le prestamos la debida atención. Es posible que mirar la sombra por primera vez nos cause mucho conflicto, confusión ó miedo. Puede presentarse en una enfermedad, en un vicio, en constantes problemas familiares y sociales; hasta en sueños que alteran nuestro sistema nervioso. El síntoma siempre es la información faltante que necesitamos interiorizar. Proviene de la sombra, por eso nos cuesta reconocerlo.
El objetivo de la Terapia de la Sombra es identificar los bloqueos y desinhibirlos, retirando los condicionamientos. Toda enfermedad, todo estancamiento es resultado de un estancamiento corporal, sexual, intelectual o emocional. La curación se compone de energía liberada, no reprimida.
Trabajando con la información arquetípica, abrimos puertas a través de disciplinados rituales que se corresponden con nuestro nivel de entendimiento. La vida se ritualiza en función a nuestra evolución.
No podemos fracasar en integrar la sombra, reconocerla como nuestra, mirarla para no proyectarla. Necesitamos darle voz, expresarla de una forma creativa y sana, pues si no reconoces tu sombra, no estás completo. El repudio de cualquier principio es la forma más segura de que lleguemos a vivir aquello que repudiamos.
La Terapia de la Sombra es un trabajo amoroso, compasivo y valiente, diseñado para personas que han observado lo suficiente dentro de sí, como para haber asumido que: “Lo que no me gusta de mí, también soy yo”. Para quienes quieren dejar de pedir perdón por ser quienes son y dejar de culpar a otros por su infancia, por aquello en lo que se han convertido. Que quieran elevarse por encima de sí mismas y dejar de excusarse en su conflicto y pereza.
Sorry, the comment form is closed at this time.