Visiones alrededor del Fuego es el segundo compendio de poemas de Caperucita Loba. En este, hay una voz que nos habla de su experiencia con lo onírico, con sueños y visiones, con la presencia de quien se pone ante el fuego para recibir no sólo su calor y su belleza, sino su poder de transformarlo todo. Poner el corazón en la brasa para sentirse, para saberse, para aprender lo que este elemento tan entrañable tiene por enseñarnos sobre nosotros mismos. Es descubrir que todo el conocimiento está en la naturaleza, donde los elementos tienen tanto por enseñarnos y mostrarnos sobre nosotros mismos. Donde estar ante el fuego, es encender el propio fuego interno para poder mirarse como quien enciende una cerilla en su inmensa oscuridad.
“Abrazo que al ser mujer tengo dos bocas para besar. Con una me como a la tierra, con otra el amor. Ambas convergen en un cordón umbilical que me conecta a mis abuelas.
Y es que yo no sé darle sorbitos a la vida. Solo sé devorarla. Ya no necesito el miedo para transitar. Todo es amor, hasta mi miedo. Cosmonauta de la tierra, ciudadana de las estrellas.
Me he despertado. Y la mujer que ahora se me aparece al espejo, es la mujer a la que le brotan serpientes que le revelan caminos.”
Fase REM, Visiones alrededor del Fuego.
Yo soy
La sangre que engendró con amor
Las mujeres que parieron de rodillas
Incubadora del universo,
Brazos que mecen, Canción de cuna.
Yo soy
El trazo y la línea
La energía que empuja el lápiz
a contar el cuento,
El deseo que planta semillas y las riega en sueños.
Yo soy
Las voces de mis hermanas que en coro me guían
Transformando deseos en certezas
El jinete y la furia del animal que galopa
La guardiana del fuego.
La que tiende su mano a hombres honestos
y ha roto el trato con el depredador.
Todo cabe en mi jardín psíquico
Llevo entre mis piernas el altar y la flor.
Yo Soy, Visiones alrededor del fuego.